Muero y muero:
Un nudo sin ojos revuelto en una taza sin azúcar.
Muero y muero conjugando el verbo majaderamente.
Vivir y no saber vivir.
Muero y muero rimando los caminos; Rasgueando la guitarra hasta quedarme sin manos.
Muero y muero ungiendo fantasmas con saliva. Les disparo a los mentirosos y me devuelven las balas como un poderoso espejo.
Muero y muero confundiéndome con los pliegues de mi cama. Y aún creo que este salar verá alguna vez brotar algo verde.
Quiero alas para quemarme en el sol, y una voz más fuerte para construir mi hogar. No deseo que mis hijos me vean así.
Muero y muero porque vivo y no sé vivir.
Fotógrafia desde internet.